TIEMPOS DE NADA

El tiempo está triste, como la vida.


El invierno se está acercando, los días son cada vez más fríos y muy cortos.


Las noches, eternamente largas.


Las gentes preocupadas, las noticias desalentadoras. El Euro ocultando sus vergüenzas, todos hablan de él. Su prestigio se ha derrumbado, en los bancos no hay nada más que papel, nadie da nada por su supervivencia.


Reuniones y más reuniones para intentar salvarlo ¡OJALA! y mientras, los ciudadanos, en un sin vivir.


¿Y sabéis que es lo peor? ¡El sonido a Navidad!


Serán muchas las familias que se reúnan, que disfruten de una eventual FELICIDAD, pero serán muchas más las que  estén solas, sin trabajo, enfermos.....y sin nadie que te invite a su mesa.


¡Qué horror! Que vida más desigual, más truculenta....y encima te vendrá alguien gritando FELICIDADES, cuando pensamos diariamente que "debemos reinventarnos con visión y no tanta planificación, ya que los planes hechos ayer ya no sirven para mañana"

Todos se quejan, comercios, hoteles, médicos, comunidades, políticos, sindicatos, los maestros, los niños, las niñas, los abuelos, las abuelas, la iglesia....Pero los que no se quejan son los pobres, porque estos han sido siempre pobres, ¿por qué se van a quejar?  ¡si lo que no han sido nunca es ser FELICES!